El Registro de la Propiedad se encarga de administrar y publicitar la información relativa a la propiedad de bienes inmuebles. En el registro todo el territorio español está organizado en forma de fincas registrales, cada una de las cuales puede contener varias viviendas o inmuebles.
Pueden existir diferentes oficinas del registro en una misma ciudad, sobre todo en las ciudades más grandes, por lo que en caso de necesitar acudir a ellas es necesario conocer cuál es el encargado de gestionar la ubicación concreta del inmueble.
La inscripción en el registro de la propiedad no es obligatoria, pero otorga muchas ventajas a la hora de demostrar la propiedad de una vivienda, y es un requisito indispensable en la formalización de hipotecas, en procesos de embargo, etc.
Mediante consultas al Registro de la Propiedad podemos obtener diferentes tipos de certificaciones de carácter oficial, entre ellas las más destacadas son:
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